
He aprendido con el tiempo que la vida es una calle con sentido único, nunca se puede ir marcha atrás y aunque se pudriera hacer me pensaría si hacerlo. Bueno, el caso es que el otro día me dio por abrir la nevera, con todos esos zumos de melocotón y me acordé de ti.. y lo más curioso es que ni si quiera se me estrujó el corazón, solté una sonrisa al aire y la cerré con fuerza cómo queriendo quemar todo.. por última vez.
Espero que te vaya bien, bueno no.. espero que tengas exactamente lo que te mereces ya eso sea bueno o malo. Porque el mundo, la vida y las acciones que hagamos pondrán a cada uno en su lugar, a cada nube en su cielo, a cada rey en su trono y a cada perdedor en su banquillo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario